Cada año, el Barómetro de Confianza de Edelman toma el pulso de las cuatro instituciones fundamentales de la sociedad actual – el gobierno, las empresas, los medios de comunicación y las organizaciones no gubernamentales (ONGs) – y la percepción que tiene la ciudadanía sobre ellas.
El informe publicado en el arranque de este 2021 ha mostrado que, en esta ocasión, y por primera vez en su historia, las empresas son las organizaciones que poseen mayor capacidad de cambio social, por encima incluso de los medios o las administraciones públicas. De hecho, se identifica a las empresas como las instituciones más éticas y competentes, acercándose al estatus y confianza que arrojan las ONG. Del estudio se deriva que los acontecimientos del 2020 no han hecho más que afianzar el compromiso, papel y responsabilidad de las empresas en el ámbito de lo social, lo que hace tangible el interés del tejido empresarial por impulsar estrategias vinculadas a fomentar la inclusión, la equidad y la diversidad.
Esto es precisamente lo que persigue ‘Empresas por la diversidad y la inclusión’, impulsado por la Fundación Randstad, en el que estamos participando. Este proyecto tiene como objetivo generar conocimiento en torno a todos estos aspectos y hacerlo llegar a toda la sociedad, propiciando así la integración de la diversidad en materia de discapacidad y empleo.
Para este 2021, el proyecto tiene como primeros objetivos la gestión de la diversidad y el liderazgo inclusivo. Para ello, en estos primeros meses el equipo de expertos, liderado por el profesor de la Universidad de La Rioja (UNIR) Guillermo García, van a diseñar una plataforma para que las empresas participantes como la nuestra puedan utilizarla y adaptarla a sus procedimientos, midiendo diferentes indicadores de Diversidad e Inclusión con el objetivo de detectar posible áreas de mejora.
La idea es arrojar un análisis sencillo y ágil con base científica para que las compañías puedan realizar un autodiagnóstico. Una vez que se determine el resultado, se podrán delinear unas directrices para mejorar el impacto de la diversidad y la inclusión en las entidades participantes.
“Tenemos muchas ganas de conocer las conclusiones del estudio. Es importante saber dónde están nuestras debilidades para trabajar sobre ellas. A veces, en las empresas tenemos muy buenas intenciones, pero no sabemos cómo enfocarlas o aplicarlas de la mejor manera, así que poner la lupa en lo que puede mejorar a través de la mirada de expertos es un regalo para nosotros y esperamos sacarle partido”, destaca Pilar Choza, directora de RRHH y Comunicación.
A lo largo del año, también se llevarán a cabo otras acciones para seguir dando visibilidad al proyecto, como la realización de jornadas técnicas, orientadas a la generación de debate y posicionamiento con think tank empresarial; campañas de difusión y sensibilización, o la organización de jornadas de difusión de la cultura y conocimiento de la discapacidad y la diversidad.